Casi como un apéndice al informe, la tendencia que se extendió en los 90s y campea en el inicio del nuevo milenio: las voces podridas // publicado por: César Fuentes Rodríguez
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ADVERTENCIA INSOSLAYABLE: Este informe fue preparado para la revista HEAVY ROCK en 2007. Esto significa dos cosas: que está mayormente desactualizado y que contiene algunos españolismos en el lenguaje. No obstante, trata de los cantantes que hicieron la historia grande del género y aún puede leerse con provecho más allá de estas salvedades.
La polémica se remonta a los días en que surgió Venom en la escena. ¿Se le puede llamar canto a lo que practican las voces que no hacen honor a la melodía? Las corrientes extremas del Metal prescinden a menudo de la menor entonación, limitándose a los gritos, berridos, vocalizaciones guturales o bramidos, sin necesidad de elaborar una línea melódica y en algunos casos ahorrándose hasta la confección de una letra por aquello de que utilizan la voz como instrumento antes que como recurso literario. A esta altura, algunas bandas han incorporado la figura del gruñón junto a la del cantante, separando claramente una cosa de la otra, como es el caso de Epica, con Simone Simons a cargo de las melodías vocales y Mark Jansen de los alaridos. En el caso del death metal o el grindcore, toda melodía suele quedar excluida del panorama. Más de una vez se ha dicho que los vocalistas no cantan sino que, a lo sumo, ladran. A mediados de los '90s en Nueva York apareció Caninus, una banda singular donde los "cantantes" eran perros de verdad, dos pitbull terriers a los que se hace gruñir o ladrar oportunamente para obtener los mismos resultados. Sus creadores declaran que no quisieron perder el tiempo con vocalistas que imiten sino que fueron directamente "a por la cosa real". Sátiras aparte, son bastante pocos los rasgos que pueden describirse en cada gruñón, más allá de la intensidad o el tono particular; y, sin embargo, no son todos iguales…
CRONOS (Venom)
Perfil: Conrad Lant, más conocido bajo el pseudónimo de Cronos, antes que como cantante sonaba como un borracho pidiendo pelea a gritos sobre el escenario, o como un engendro salido de los genes de Lemmy Kilmister y Gene Simmons y vaciado de toda responsabilidad. Para algunos, la prueba viviente de que cualquiera puede pararse delante de un micrófono y abrir la boca, por menos condiciones vocales que demuestre. No obstante, su osadía hizo escuela y es difícil no individualizarlo como el padre de todas las voces podridas de este mundo a partir de "Welcome To Hell" (1981) y "Black Metal" (1982).
También chequear: Quorthon (Bathory), Tom Gabriel Fischer (Celtic Frost), Paul Baloff (Exodus), Killjoy (Necrophagia), Alberto Contini (Bulldozer), Chris Reifert (Autopsy).
TOM ARAYA (Slayer)
Perfil: El thrash fue territorio apto para la disolución de la melodía vocal y Slayer contribuyó como ninguno a desdibujar los límites. Aunque sería injusto designar a Tom Araya como un mero berreador (puesto que las melodías de clásicos como "South Of Heaven" o "Seasons In The Abyss", por ejemplo, resultarían muy sencillas de reconocer), es muy cierto que la aparición de Slayer inspiró a las bandas extremas que siguieron a llevar el concepto aún más allá. Algunos sugieren incluso que Slayer volvió inútiles estilos posteriores enteros como el death metal o el grindcore, ya que el nivel de agresión o crudeza de álbumes como "Reign In Blood" o "Hell Awaits" nunca podrá ser superado o no vale la pena hacerlo. Pero por más que la letanía de los acentos se adapte al machaque thrasher o que las andanadas de sílabas se agolpen sobre los fraseos de guitarras generando una inquietante sensación de caos controlado, hay que reconocer que Araya nunca prescindió de recursos habituales en el heavy metal tradicional, como los gritos en falsete, o costumbres del hardcore, como las parrafadas continuadas y agudas.
También chequear: Mille Petrozza (Kreator), Tom Angelripper (Sodom), Schmier (Destruction), Gerre (Tankard), Patrick Mameli (Pestilence), Chris Astley (Xentrix), Steve Souza (Exodus), Billy Milano (S.O.D., M.O.D.), John Connelly (Nuclear Assault), Chuck Billy (Testament), Tony Portaro (Whiplash), Snake (Voivod), Matt Drake (Evile), Rob Dukes (Exodus), Kelly Shaefer (Atheist).
CHUCK SCHULDINER (Death)
Perfil: Dicen por ahí que la primera banda en usar la técnica de la "voz podrida" fue Death con sus dos vocalistas, Kam Lee y Chuck Schuldiner, y que de paso su desarrollo le dio nombre a un estilo. Aunque eventualmente Chuck demostró que había vida más allá de lo gutural, sobre todo con su grupo paralelo Control Denied, y hasta se animó a una versión impresionante del "Painkiller" de Judas Priest, la muerte se lo llevó demasiado joven y con una carrera llena de posibilidades.
También chequear: Maurice Swinkels (Legion Of The Damned), Jeff Becerra (Possessed), Lee Dorrian (Napalm Death), Paul Speckmann (Master), Christofer Johnsson (Messiah), Barney Greenway (Napalm Death, Benediction), George Fischer (Cannibal Corpse), Wagner Lamounier (Sarcófago),
JOHN TARDY (Obituary)
Perfil: Aun cuando el death metal ya se había afirmado sobre sus endebles bases (agresión, agresión y nada más que agresión), acaso faltaba determinar quién rugía más alto. Y el premio obviamente se lo llevó John Tardy, quien además tuvo la hidalguía de reconocer que no perdía el tiempo inventando letras que luego tampoco serían comprendidas o descifradas en tiempo real.
También chequear: Ron Rinehart (Dark Angel), Chris Barnes (Cannibal Corpse), Max Cavalera (Sepultura, Soulfly), Glenn Benton (Deicide), Grutle Kiellson(Enslaved), Henri Sattler (God Dethroned), Jason Mendonca (Ackercocke), Martin Schirenc (Pungent Stench/Hollenthon), David Vincent (Morbid Angel), Dave Rotten (Avulsed), Carlos Lopes (Dorsal Atlântica), Jeff Walker (Carcass), Frank Mullen (Suffocation), Seth Putnam (Anal Cunt)
LARS GÖRAN PETROV (Entombed)
Perfil: Aunque Entombed comenzó como pionero del death metal escandinavo, para 1990 su estilo había asimilado elementos del hardcore punk hasta que eventualmente fue redefinido en la categoría poco ortodoxa de death'n'roll. Su vocalista, LG Petrov se adaptó puntualmente a la evolución sin alterar demasiado los cánones de su voz. Alguno se sorprenderá al enterarse de que con su voz de barítono es capaz de cantar limpiamente desde Sinatra hasta melodías clásicas.
También chequear: Jan Chris de Koeijer (Gorefest), Johnny Dordevic (Carnage), Johnny Santos (Spineshank), Christian Machado (Ill Niño), Johan Hegg (Amon Amarth), Randy Blythe (Lamb Of God), Dan Swanö (Edge Of Sanity).
DANI FILTH (Cradle Of Filth)
Perfil: La opción del berrido agudo no figuraba al frente de las posibilidades cuando la guturalidad arreciaba, pero Dani la dotó de futuro con su representación de un vampiro enloquecido de animalidad y apenas gótico en su enfoque. Ninguna audacia pareció desde entonces fuera de lugar, ni siquiera la de combinar todos los registros de lo macabro y lo podrido.
También chequear: Dead (Mayhem), Attila Csihar (Mayhem/Keep Of Kalessin), Maniac (Mayhem), Nocturno Culto/Fenriz (Darkthrone), Satyr (Satyricon), Abbath (Immortal), Ihsahn/Samoth (Emperor), Vorph (Samael), Gaahl (Gorgoroth), Varg Vikernes (Burzum), Kristoffer Rygg (Ulver), Gunther Theys (Ancient Rites), Silenoz/Shagrath (Dimmu Borgir), Sakis Tolis (Rotting Christ).
TOMAS LINDBERG (At The Gates)
Perfil: No tanto la singularidad de su vocalista como el inesperado éxito que tuvo una idea aparentemente tan ridícula como es la de mezclar metal melódico de calidad con voces podridas, puso a los suecos At The Gates como pioneros de la llamada "escena de Gotenburgo" junto con In Flames, Dark Tranquillity, Lake Of Tears y demás. El "death metal melódico", por oximorónico que parezca el término, ha contagiado su enfermedad a todas partes.
También Chequear: Anders Fridén (In Flames), Jon Nödtveidt (Dissection), Mikael Stanne (Dark Tranquillity), Aaron Stainthorpe (My Dying Bride), Björn Strid (Soilwork).
[Continuará]