Curriculum Vitæ

Se supone que un currículum tiene que ser algo profesional y aséptico, pero ya se sabe lo difícil que resulta tratar de decir algo sobre uno mismo en tercera persona sin parecer un demente. Así que, a cambio de la licencia de presentarlo por mí mismo, voy a procurar ser breve y directo.

Nací en el barrio de Barracas, Buenos Aires, Capital, Argentina. Mis padres son españoles, así que en cierto sentido yo también. Ius solis, ius sanguinis, doble nacionalidad, doble perspectiva.

Jugué, leí, miré mucha televisión, estudié, trabajé... Luego me recibí de Licenciado en Letras por la Universidad de Buenos Aires y confirmé que lo más importante de la vida no está en los títulos. A propósito, y si es por sumar, saqué también la Licenciatura en Filología Hispánica en la Universidad de Barcelona. Como si a alguien le importara…

Empecé tempranamente a escribir, pero en principio publiqué muy poco, llámenle pudor o exceso de crítica. Salté de la literatura al periodismo por amor a la música que me gusta, llámese rock and roll, heavy metal o rock con mayúsculas y a secas. Eso habrá sido por el '82. Tiempo después me desempeñé como redactor y cronista en una revista especializada llamada Riff Raff, quizás alguien la recuerde.

Como no tenía dónde escribir y otros amigos tampoco, se me ocurrió la traumática idea de costear una revista. Así nació Madhouse, en 1989, y hay que reconocer que, aunque a los tumbos, duró bastante, hasta el desastre del 2001. Incluso la editorial que se formó en torno a ella llegó a editar publicaciones improbables como El Conocedor Del Vino (enología y gastronomía) y La Cosa (cine y literatura). Yo, mientras tanto, realicé colaboraciones eventuales en revistas musicales internacionales en inglés y castellano -Heavy Rock (España), Rock Hard (España), Force Magazine (España), Mix (Argentina), Rock Brigade (Brasil), HM Subterráneo (México), Hard Rock (Australia), Iron Pages (Alemania), etc.-

Con el tiempo, aquella revista inicial fue cambiando hasta tal punto que yo ya no compartía el rumbo editorial que había tomado, así que decidí montar un proyecto nuevo con un equipo diferente de amigos; se llamó Epopeya, y creo que nos dio a todos grandes satisfacciones.

El periodismo musical me llevó asimismo a la radio y la televisión. Trabajé como productor y conductor del programa musical Power 30 (MuchMusic TV) entre 1994 y 1996 y de El Rock Nunca Aprenderá (San Francisco Cable, Adrogué) en la temporada '93-'94. Fui columnista en Heavy Rock & Pop (FM Rock & Pop) con el Ruso Verea y Alejandro Nagy desde 1990 hasta 1995, y conductor y productor artístico del programa Ave César (FM NRG 101.1 - FM Palermo 94.7) desde 1999 a 2001, entre otros. Me divertí mucho y tuve la oportunidad de conocer a la mayoría de los grandes del género. Más no se podía pedir.

En 2002 me fui a vivir a Barcelona, España. No tuvo nada que ver con una cuestión laboral o profesional, la decisión fue de tipo familiar. Seguí escribiendo; más que nada cosas mías y para algunas revistas que iniciaron los amigos en Buenos Aires, como Requiem o Maelstrom. La editorial Quarentena de España publicó mi biografía de Iron Maiden titulada "El Viaje De La Doncella" y "Mundo Gótico", probablemente el primer ensayo sobre el movimiento gótico que se escribe directamente en castellano.

En 2007 volví a la Argentina y durante un tiempo estuve dando una mano con la revista Requiem, que incluía a varios de los amigos de Epopeya. Publiqué mi primera obra de ficción, "El Infierno Y Los Celacantos", que es una suerte de novela gótica con elementos eróticos, policiales y de ciencia ficción y hace muy poco reedité "El Viaje De La Doncella" corregido y actualizado a través de la editorial Distal. Conduje un par de temporadas de MTL en televisión (CMTV) junto con al inefable Walter Meza y dos programas de radio por Internet: El Noticiero De Las Pampas y nuevamente Ave César, con Sergio Choren y Luis Aranosky como acólitos de lujo.

Desde 2012 a 2017 conduje Tiempos Violentos en FM Rock & Pop. Y apenas se acabó comencé un programa por streaming en Internet con Emiliano Obregón titulado La Hora Clandestina. La historia continúa y todo pasado es prólogo.

¡No detengan su motor!

César Fuentes Rodríguez